Seamos honestos, como invitados a una boda o recepción, todos hemos querido ser siempre el mejor de los invitados. Y esto ya sea por puntualidad, por nuestra vestimenta o por nuestro comportamiento. Sea cual sea la razón, convertirnos en el mejor de los invitados, ha de ser motivo de satisfacción y no solamente por destacarse entre los demás sino, más bien, por el deber cumplido; asumiendo que nuestro rol como invitado, es de importancia vital en el enriquecimiento de las relaciones sociales.
Veamos a continuación algunas normas que nos ayudarán a ser un invitado de cinco estrellas!
1. Respuesta expedita
Inmediatamente recibimos una invitación, nos cumple el deber de responder a la brevedad posible para confirmar o por el contrario excusar nuestra asistencia. Esto, debido a que es de mal gusto hacer esperar a los anfitriones que en tan buen ánimo nos han extendido una invitación a compartir con ellos.
2. Llegada puntual
Un invitado cinco estrellas es puntual llegando a la hora pautada en la invitación. Cada vez más, los especialistas en celebraciones, vemos como esta norma tan simple, es tan relajada por las personas. Más, sin embargo, es de muy mal gusto faltar a esta norma, no solo en el contexto de cumplir con la invitación, sino en la práctica diaria como comunes ciudadanos.
3. Participa del acto religioso o ceremonial
En caso que la boda sea celebrada con un acto religioso o ceremonia, el invitado debe asistir puntual y oportunamente al mismo. Lo que muchas personas no logran entender es, que en las bodas, se les invita a ser testigos de este acto tan solemne y único en sus características, a través del cual dos personas sellan su amor bajo un compromiso formal. Pasado el acto, también se le invita a un banquete o recepción. Pero a fin de cuentas, a usted lo están invitando a la ceremonia y no a "la pachanga". Esta es una norma que va perdiendo esencia con el paso del tiempo, las parejas invierten cantidades de dinero en la recepción, olvidando que la ceremonia es el fundamento de esta reunión y se estimula a "pasar por alto" el sublime acto del matrimonio.
4. Viste de acuerdo a la ocasión
Fuera de llevar la última moda y estilismo, el invitado a una recepción habrá de cuidar estar impecablemente vestido y a tono con la actividad a la que hemos sido invitados. Coordinar colores según a estación del año, así como la elegancia de acuerdo al lugar de la ceremonia, cuidando las damas escotes escandalosos en templos e iglesias y tacones stilettos en grama o pedernales; evitar a toda costa usar el color blanco en una boda, esto es uso exclusivo de la novia y está considerado como una falta grave a la etiqueta y como invitada. Así también debemos tener presente que, debemos cuidar no hacer sombra a los anfitriones, quienes por regla general, deben destacar.
5. Hace un regalo
El invitado cinco estrellas hace un regalo como muestra de cortesía por la invitación a una fiesta o recepción. Este regalo lo hace oportunamente, dependiendo de la ocasión. Si es una boda, debe hacer la entrega de regalo antes de la misma. Es de mal gusto hacer entrega de regalos el mismo día de la boda y en medio de todo lo que ello implica, ya sea antes de la ceremonia o a la hora del banquete. Por otra parte, si es una reunión en una casa de familia o apartamento, llevar un buen vino, dulces o bombones de exquisita presentación, son siempre una buena elección para un invitado estelar.
6. Ocupar el asiento dispuesto para nosotros
Los anfitriones trabajan por mucho tiempo, detalles valiosos y muy importantes, para que el día de la celebración todo marche impecablemente. Destinar lugares para cada uno de los invitados, es parte de ese trabajo. Todavía existen personas que tienen el mal gusto de despreciar el asiento asignado y expresar su disgusto e inconformidad. El simple hecho de extender una invitación para usted, ha sido ya un hermoso gesto. Si de alguna manera no te conformas con el lugar de tu asiento, la única recomendación válida para cambiar, sería que por cuenta propia encontraras alguien que esté de acuerdo en cambiar con usted su asiento.
7. Los niños y las recepciones
Los eventos y recepciones como las bodas y otros que impliquen ambientes de adultos, no son actividades prestas para los niños. Entendemos que si estamos en una boda en la que participan niños como parte del cortejo, sólo estarán presentes en la ceremonia y no en el banquete. Las bodas son recepciones para adultos y es una actitud desconsiderada llevar niños a este tipo de ambientes. Si la boda es muy íntima familiar y hay mas niños, entonces se ha de considerar un espacio especial para ellos, atención designada y un menú adecuado.
8. Abusos en las recepciones
Un invitado a la altura de cinco estrellas no abusa de la comida del banquete, los postres, los souvenirs, artículos decorativos, flores, ni de la bebida, hasta emborracharse. Un invitado cinco estrellas sabrá comportarse con respeto hacia los demás invitados, entablando conversación amena y oportuna; compartiendo con ellos y conservando siempre el decoro.
9. Dejar propina
El invitado cinco estrellas sabe que un servicio adecuado y con gusto, amerita ser propinado. En el caso de las recepciones donde hay meseros al servicio, es de buen gusto propinarlos de acuerdo a la calidad del servicio recibido.
10. Permanecer y participar
El invitado ha de participar en las actividades de la recepción como el baile, karaoke u otras como la hora loca o la hora de entretenimiento. Es de buen gusto que el invitado pueda participar de las actividades que se realizan puesto que lo hacen partícipe de lo que los anfitriones han considerado que él (el invitado) pueda disfrutar junto a ellos. Así también es muy valioso el que permanezca el mayor tiempo posible en la actividad evitando irse "a mitad de fiesta" y mucho peor, que caiga en el error de hacer la muy desagradable "despedida a la francesa". Esto es, cuando el invitado se marcha sin siquiera despedirse. Es un deber del invitado hacer saber que se marcha y expresar su agradecimiento por la invitación y las atenciones recibidas.
Esperamos que pueda seguir estas normas y que pueda convertirse en un invitado de otra galaxia, un invitado de cinco estrellas!
